En los últimos años la céntrica parroquia de San José tomó una medida acertadísima. Cuando el templo cierra a las horas del mediodía, y a fin de no privar a los fieles que lo deseen de la oración ante Jesús Sacramentado, se habilita un pequeño oratorio cercano al atrio, en el que se expone a la adoración el Santísimo Sacramento. Un auténtico oasis en pleno centro de Gijón, en una de sus calles más concurridas por ser vía de acceso y salida de la ciudad. Allí nos espera a todos “el Amor de los amores”.
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